HomeNOTICIASAlejandro Grullón: Humanista, pionero, banquero y emprendedor

Alejandro Grullón: Humanista, pionero, banquero y emprendedor

Su vida la dedicó al desarrollo social y económico de República Dominicana

Alejandro E. Grullón E. es un dominicano eterno. Su impronta, caracterizada por los innumerables aportes a la sociedad desde cualquier punto de vista, ya sea económico, cultural, financiero, empresarial y humano, lo ubican en un lugar privilegiado en la historia. Su presencia física existió por 91 años, ocho meses y algunos días. Su legado no tiene caducidad. Nació en Santiago de los Caballeros, el 3 de abril de 1929. El respeto a su memoria es perpetuo.

Don Alejandro, como le llamaban sus más cercanos colaboradores y familiares, tenía 35 años cuando pronunció el discurso de inauguración del Banco Popular, el 27 febrero de 1964, convirtiéndose en esa fecha en el fundador y presidente de la primera institución bancaria de capital privado netamente dominicana. A partir de ahí hay un antes un después en la banca local. Participó activamente en el nacimiento o formación de diversas entidades empresariales, con carácter social y otras sin fines de lucro, incluyendo la Asociación de Bancos Comerciales (ABA).

Consagrado al trabajo desde muy joven, creyendo siempre en la capacidad de emprendimiento de las personas, fue un defensor y promotor de algunos de los proyectos que mayor aportes han hecho al desarrollo social y económico de República Dominicana. El Banco Popular tiene más de 56 años y ese hoy un referente de banca responsable a nivel regional.

Estudió en la Escuela Normal Ulises Francisco Espaillat, en Santiago de los Caballeros. Asistió a Bucknell University, de Pensilvania, donde inició estudios de Medicina. Más tarde, pasó a la Universidad de Syracuse, en Nueva York, donde obtuvo el título de grado en Administración de Empresas y Ciencias Forestales.

A inicios de los 60, cuando regresó al país, trabajó en aserraderos propiedad de sus familiares, formando parte de la Asociación para el Desarrollo, organización que dio impulso a instituciones como la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, el Banco Popular Dominicano, el Instituto Superior de Agricultura (ISA) y el Centro de Investigación y Mejoramiento de la Producción Animal (Cimpa), entre otros.

Durante su etapa de empresario agrícola, don Alejandro notó la necesidad de contar con mejores servicios financieros para la sociedad dominicana. Es así como en agosto de 1963, basándose en una inversión de capital y talento dominicanos, obtuvo la autorización de la Junta Monetaria para la fundación del Banco Popular Dominicano, que abrió sus puertas el 2 de enero de 1964, siendo el primer banco de capital privado dominicano. Bajo su dirección se crearon múltiples instituciones financieras.

Mediante sus contribuciones se crearon filiales internacionales como el BPD Bank, que operó hasta 2013 bajo la legislación norteamericana en Nueva York, reconocida por la Federal Deposit Insurance Corporation (FDIC), y el Popular Bank, que opera bajo las leyes de la República de Panamá.

Realizó aportes a la institucionalización del sector financiero no sólo a través de la creación de la ABA, sino por vía de destacadas instituciones de bienestar social como la Fundación Dominicana de Desarrollo (FDD), de fortalecimiento de la institucionalidad democrática como la Fundación Institucionalidad y Justicia (Finjus) y de preservación y proyección cultural como el Museo de La Altagracia. En la actualidad, presidía la Fundación Popular.

Reconocimiento

En 2014 los consejos de administración y las asambleas de accionistas le designaron como presidente ad vitam y consejero emérito de Grupo Popular y de Banco Popular. Fue además gobernador de la Comisión de Seguimiento a los Trabajos de Remozamiento y Mantenimiento de la Basílica Catedral Nuestra Señora de La Altagracia y presidente del Plan Sierra. Adicionalmente, fue miembro de la Fundación Patronato Cueva de las Maravillas, de la Fundación Sur Futuro y del Consejo Consultivo Presidencial.

Fruto de su matrimonio con Dinorah Viñas Messina (fallecida), procreó a Manuel Alejandro, Virginia María y Eduardo José Grullón Viñas; y, junto a su actual esposa, Melba Segura Castillo, a Alexandra María Grullón Segura.

Por sus valiosas contribuciones a la sociedad fue reconocido con el grado de Comendador por la “Orden de Duarte, Sánchez y Mella”, con el grado Gran Cruz Placa de Plata por la “Orden Heráldica de Cristóbal Colón”, ambas emanadas de la Presidencia de la República.

Adicionalmente, recibió la “Orden de San Gregorio Magno”, en el grado de Caballero de Gran Cruz, otorgada por Su Santidad Juan Pablo II; un Doctorado Honoris Causa en Humanidades, por la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, en 1997; y un Doctorado Honoris Causa en Ciencias de la Administración, por la Universidad Central del Este, en 2008.

El 20 de agosto de 2008 recibió, además, el reconocimiento a su exitosa y fructífera carrera empresarial por la Cámara de Diputados de la República Dominicana, mientras que en 2011 el Senado de la República también le distinguió por sus aportes al país a través de su labor empresarial y social.

En mayo de 2015, durante el lanzamiento de la Cátedra de Responsabilidad Social Empresarial y Sostenibilidad “Alejandro E. Grullón E.”, la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM) homenajeó a don Alejandro por su entrega a la creación y consolidación de una empresa que ha sido el motor de grandes beneficios para el país, así como por su rol de ciudadano ejemplar, impulsor de obras filantrópicas y de bienestar social, y por su modelo de compromiso ético.

En 2016, en el marco del Día Nacional de la Empresa Privada, el Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep) reconoció su trayectoria empresarial y la visión al fundar el primer banco comercial de capital privado del país, destacando su determinación y liderazgo visionario, señas que lo convirtieron en ejemplo e inspiración para todas las generaciones de empresarios y emprendedores.

Familia

Don Alejandro E. Grullón E. (1929-2020) fue hijo de los señores Manuel Grullón Rodríguez-Objío y Amantina Espaillat González, quienes además procrearon a los también fallecidos Arturo Grullón Espaillat y Máximo Grullón Espaillat.
Por parte de su madre, el fallecido banquero era descendiente de Tomás Bobadilla y Briones e Ignacio María González, quienes dirigieron los destinos de la nación en un período del siglo XIX.

La línea de su padre, Manuel Grullón Rodríguez-Objío, está dignamente representada por Máximo Grullón Salcedo, prócer de la Restauración; el destacado escritor Virgilio Díaz Grullón y Arturo Grullón Julia, el primer cirujano graduado dominicano en ejercer esta especialidad en el país y quien, además, se destacó por plasmar en el lienzo y en la fotografía los rostros humanos que estudiaba con carácter científico, llegando a realizar hermosas obras pictóricas.

Don Alejandro murió en La Romana a causa de un paro cardiorrespiratorio, según certificó el médico José López.

Fuente: https://www.eldinero.com.do/

vehículos eléctricos
Previous post
InterEnergy firma iniciativa global para acelerar transición a vehículos eléctricos
Jeff Bezos
Next post
Las 3 preguntas que Jeff Bezos se hace a la hora de contratar a un empleado